Más allá de ser probablemente el más importante intérprete de reguetón, Daddy Yankee se ha convertido en una marca que es la imagen de varios productos que no tienen nada que ver con la música. “El cielo es el límite: tenemos una película nueva, ‘Daddy Yankee Mundial’; el nuevo perfume para damas; un programa de televisión en México que se llama ‘Tunéame la nave’, por TV Azteca”, explica el cantante que con “La gasolina” dio carácter universal a un género tan atacado como el reggaetón.
Daddy Yankee regresa al país, un lugar con el que mantiene desde el principio de su carrera una estrecha relación, para su primera presentación en Altos de Chavón. “Quiero cantar ahí; es algo que siempre anhelaba y estamos preparando un show de altura para ir para allá”, expone Yankee.
Lleno de los proyectos que mencionamos antes lo convierten como a los superhéroes, en dos personas distintas.
Uno es el joven Raymond Ayala y el otro es Daddy Yankee, actor, cantante, compositor, presentador de televisión, productor de cine y empresario, cuya imagen es una marca.
“Son dos cosas diferentes, obviamente para que todo funcione tienes que estar en paz contigo mismo, estar bien balanceado y saber que hay que ser sumamente apasionado con el arte”, dice el artista nacido hace 33 años.
En ese sentido ve con responsabilidad todo lo que hace. “Hay que proteger la marca con buenos productos y buena música, siempre defendiendo la calidad”, expresa, al agregar que es un tren que no se detiene