En medio de un griterío ensordecedor, Aerosmith hizo su aparición por la puerta de llegadas internacionales y provocó un gran movimiento de gente.
Y a pesar de los gritos, Steven Tyler y Joey Kramer se acercaron a saludar a algunos fans e, incluso, el vocalista de la banda le firmó un libro a un seguidor eufórico.
La banda se presentará este sábado en el estadio de San Marcos.
Trome